La Asociación de Empresarios de Tweedy Mile se adapta con menos recursos

La , la organización que trabaja para apoyar el comercio en el bulevar Tweedy, y que incluye cerca de 300 propietarios de negocios, se enfrenta a difíciles obstáculos financieros. El grupo se constituyó como una institución sin fines de lucro en el 2007, y le fue otorgada una subvención de $ 600.000 por parte la ciudad de South Gate. Una cantidad dedicada a cubrir los gastos de la organización durante tres años.

"La ciudad nos dió los fondos para 3 años e hicimos que nos duraran 4", dijo Laverne Bates, tesorera de la organización y propietaria de Bates Realty en el bulevar Tweedy. "Somos muy conservadores [con nuestros fondos]".

La capacidad de la Asociación de Empresarios de Tweedy Mile para llevar a cabo eficazmente su misión -la promoción de empresas en el bulevar- se ha reducido, pues se vió obligada a recortar algunas de las populares actividades anuales que patrocina y organiza.

"La Asociación de Empresarios de Tweedy Mile hacía muchas promociones diferentes, como rifas de jamones en Navidad y pavos en el Día de Acción de Gracias", dijo Eduardo Díaz, propietario de -una tienda de ropa en el bulevar Tweedy- y miembro del concejo de la asociación. "Para la navidad también teníamos un trineo con Papá Noel en el bulevar, donde los niños podían tomarse fotos".

Estas actividades no sólo eran una experiencia divertida para los participantes, sino también una forma de atraer a la gente al bulevar Tweedy. Así alcanzaban más clientes potenciales para los propietarios de negocios durante estos momentos difíciles para la economía.

"Estos tres [eventos] son importantes para los comerciantes de la avenida, ya que atraían a los clientes", dijo Díaz. "Sin esas cosas todo puede volverse aún más lento".

Otro grave corte que la asociación tuvo que hacer, fue eliminar el cargo de director ejecutivo de tiempo completo. Este puesto era importante para la gestión eficaz de las diversas actividades de la organización, que ahora funciona gracias a una mayoría de voluntarios.

"Tener un director ejecutivo era de mucha ayuda", dijo Díaz. Agregó que muchos de los dueños de negocios tienen agendas profesionales muy ocupadas, además de tener deberes familiares. "Mucha gente no se responsabiliza porque no tienen tiempo."

El lugar en la red de la Asociación de Empresarios de Tweedy Mile no se actualiza regularmente, y menos aún sin el director ejecutivo, perdiendo así la eficacia de los esfuerzos de comunicación. Por ejemplo, pocas personas se enteraron de que la rifa anual de caramelos durante Halloween había sido cancelada.

"La gente pensó que lo haríamos este año", dijo René Ornelas, presidente de la Tweedy Mile Association y propietario de . "Vinieron al bulevar Tweedy, pues esperaban el evento." Él, junto con Laverne Bates y otros comerciantes tuvieron que improvisar y comprar algunas cajas de dulces, gastando su propio dinero para no decepcionar a los niños.

"Más niños se presentaron este año que el año pasado", dijo Laverne. Saber que la gente anticipaba los eventos fue suficiente para hacer algo parecido. "Es importante que haya continuidad de las cosas."

A pesar de la difícil realidad financiera que enfrenta la asociación, promete hacer lo más que pueda con lo poco que tiene. La Asociación de Empresarios de Tweedy Mile rifará una bicicleta el 18 de diciembre, y planea ofrecer sus clases anuales de arte para niños durante el Festival de Azalea, además de organizar la feria callejera anual en el bulevar Tweedy.

"Nosotros no vamos a poder hacer tantas cosas", concluyó Bates sobre el número de actividades para este año, "pero lo vamos a lograr de alguna manera."